Para Mendoza, que posee productos complementarios para estas economías, el tratado se presenta como un multiplicador de posibilidades.
El Gobierno nacional anunció el viernes que el Mercosur cerró un acuerdo de libre comercio con el EFTA, asociación de países integrada por Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza. ¿Cuáles son las posibilidades de negocio para Mendoza en este mercado que posee un PBI per cápita de 82.000 dólares al año?
Este tratado comercial con el bloque creado en 1960, por la Convención de Estocolmo, representa una ampliación del horizonte de negocios para el bloque sudamericano tras el reciente convenio con la Unión Europea (UE). Los países integrantes del EFTA poseen un PBI per capita casi tres veces mayor que el de sus vecinos de la Unión Europea, y una activa participación en el comercio internacional, ocupando el quinto lugar del comercio mundial de servicios y noveno en bienes.
Se dieron a conocer algunos detalles del acuerdo: una apertura de los mercados para las exportaciones, eliminando el 100% de los aranceles sobre los productos de exportación industrial. También inversiones en sectores como el de la manufactura, la energía y la minería. En la actualidad, el flujo comercial entre Mercosur y EFTA está en su nivel más bajo en la última década: $ 4,6 mil millones, después de alcanzar un máximo de $ 7,7 mil millones en 2014.
Para Mendoza, que posee productos complementarios para estas economías, el tratado se presenta como un multiplicador de posibilidades. Porque a las naciones integrantes de este bloque en 2018 ya les exportó vino, manzanas, miel y aceite de oliva; también y en menos cantidad, etiquetas y productos de papel.
En números -registrados por la DEIE- Suiza compró productos mendocinos por $16.690.840, Noruega por $2.649.142 e Islandia por $1.203.682; mientras que hacia Lietchtenstein no se registraron exportaciones.
Desarrollar la presencia
Mario Lazzaro, director de ProMendoza, explicó sobre la potencialidad del acuerdo: “Este tratado es muy importante para nuestra economía porque el perfil de estos cuatro países que conforman la EFTA es complementario para nuestra producción agroindustrial y vitivinícola. En la actualidad, Suiza es un mercado en el que comercializamos un tercio del volumen de vino que nos compra Brasil; hay que imaginar el potencial cuando se realice la desgravación impositiva”.
Mientras que al referirse a la entrada en vigor del tratado bilateral, señaló: “Esperamos que al ser menos países, menos parlamentos que deban aprobar el acuerdo, entre en vigencia con mayor rapidez al que se firmó hace dos meses con la Unión Europea. Tal vez, a fines del año próximo entre en vigencia”.
“Establecer el vínculo comercial con los integrantes de la EFTA, para Mendoza también puede representar una chance de expandirse a Europa”, destacó Lazzaro.