ProMendoza pretende mejorar las condiciones para comercializar más cantidad en el exterior. Caen las ventas. El principal competidor regional, que es Chile, tiene arancel cero para negociar en el mundo, inclusive en China
ProMendoza quiere dar pelea para que bajen los aranceles a las exportaciones de vino. Lo que se busca es mejorar las condiciones del comercio exterior frente a nuestro principal competidor, que es Chile, y que vende vinos en el mundo sin tener que pagar aranceles.
Su presidente, Jorge Pérez Cuesta, quiere armar un frente común con el Gobierno provincial para reclamar ante el gobierno de Mauricio Macri que se inicien tratativas con los países que compran vino argentino, para mejorar los requisitos arancelarios de ingreso.
El objetivo de fondo que se persigue es buscar alternativas para engrosar el volumen de ventas al exterior, que viene complicado en los últimos años. El pago de aranceles encarece en promedio, entre U$S 0,13 y U$S 0,17 centavos cada litro de vino que se vende en el exterior, lo que termina dejando fuera de mercado al vino argentino frente a países vecinos que tienen arancel 0 hasta para entrar a China. Es más, Chile es el único país que tiene un tratado de libre comercio con China, lo que explica que tenga productos importados de todos los rubros a precios más bajos que toda la región.
«Es un trabajo complejo –reconoce Pérez Cuesta–, porque para pedir rebajas arancelarias primero Argentina debe hacer causa común con todos los países que integran el bloque del Mercosur. Al ser parte de un bloque comercial, las negociaciones deben hacerse en forma integrada y luego debe plantear la rebaja en cada mercado donde vendemos vino», explicó el presidente de ProMendoza.
Las ventas en baja
Si se analizan las cifras más recientes queda claramente a la vista que las ventas han crecido un poco en precio, y han bajando en cantidad. Esto si bien no impacta en el monto total de ingreso de divisas, marca que se están perdiendo mercados en manos de otros competidores.
Estados Unidos es el principal cliente de Mendoza; la mitad del vino que se vende al mundo va a para a ese país del Norte. En la comparación de ventas efectuadas entre enero y mayo de este año, contra el mismo período del año anterior, se muestra que se han vendido U$S 99 millones, frente a U$S 105 millones que se vendieron el año pasado. Si se miran las cantidades también la balanza en este año da negativo, porque hasta mayo se vendieron 2.369.628 de cajas de vino, mientras el año pasado a la misma fecha se habían colocado 2.704.116 cajas de vino.
Para entrar a Estados Unidos hay que pagar entre U$S0,06 y U$S0,70 por litro de vino, mientras Chile no paga nada.
Lo mismo pasa con nuestro segundo mejor comprador, Reino Unido, al que se le vende el 12% del total exportable. Este año, hasta mayo, se vendieron U$S 28 millones en vino fraccionado, mientras el año pasado a la misma fecha se habían vendido U$S 24 millones. En este caso el resultado ha sido positivo, logrando un pequeño incremento en el precio y también en el volumen vendido.
Para entrar al Reino Unido hay que pagar entre U$S 0,13 y U$S 015 por litro de vino, mientras Chile no paga nada.
Canadá es otro de los tres destinos importantes en el comercio exterior de Mendoza. En la comparación interanual las ventas han estado igualadas, con lo cual el panorama –hasta ahora– es alentador.
Pero pesa el problema de la competencia chilena, que ingresa sus vinos con arancel 0.
El mercado chino hasta ahora no es importante en cuanto a la cantidad del volumen vendido, pero sí es de fundamental importancia a futuro, porque es el mercado con mayor perspectiva de crecimiento. Hoy Argentina paga en concepto de arancel el equivalente al 14% de lo que sale cada botella que ingresa a ese país, mientras Chile no paga nada.
«Lo que pedimos es igualdad de oportunidades, por eso los ministros nacionales y los legisladores nacionales deberán ponerse a trabajar para conseguir mejores condiciones. Tenemos que lograr ser competitivos como país, y esta es una medida muy necesaria», refirió Pérez Cuesta.